jueves, 29 de diciembre de 2011

El antes y el ahora de mí misma

Cuando era pequeña, mi madre me regaló un libro llamado "50 cosas simples que los niños pueden hacer para salvar la Tierra".

Siempre he sido una ávida lectora, me encantan los libros que te transportan a otros lugares, que te hacen imaginarte cosas nuevas, que te hacen desear seguir leyendo. Desde pequeña leí­a mucho ó como decía mi madre "devoraba los libros". Pero creo que este es el libro que más me marcó.

Desde ese momento tomé conciencia de que por insignificante que sea una acción, es mejor que no hacer nada. Me convertí en la "pesadilla" de mis amigas, cuando no tiraban papeles a la papelera o cosas así. Aprendí­ lo fácil que es reciclar. Que no me cuesta nada cortar las anillitas de plástico que sirven como soporte de los paquetes de latas. Pequeños gestos que no suponen nada, ¿verdad? Sólo costumbre, y pueden hacer tanto bien... Y sobre todo, recuerdo ese sentimiento de "estar haciendo algo".

Todas esas cosas las sigo haciendo, porque las asumí­ como una parte más del aprendizaje y me comprometí­ siendo una niña. Ahora forman parte de mi (Así­ que si tenéis dudas sobre qué deben traerle los reyes magos a vuestros hijos, nietos, sobrinos, ... o sobre qué pedir vosotr@s  :) , de corazón os lo recomiendo).

De ahí­ pueden salir varias ideas sobre las que ir reflexionando: los valores que se le inculcan a los niños, lo fundamental que es hacerles conscientes de que tienen poder y responsabilidad en el mundo, lo importante que es que eso no lo olviden nunca.

Pensando sobre esto, me he dado cuenta de que creí­a más en mí, en mi poder y en el poder de todos nosotros para hacer las cosas bien y para cambiar el mundo, cuando era pequeña. Me doy cuenta de que me he acomodado ó idiotizado durante mucho tiempo. O quizás me he dejado llevar por la rutina, que suena más correcto...

Ha tenido que venir esta crisis odiosa para despertar a la niña guerrera que llevo dentro, para que se me despierten las ganas de luchar, de gritar, de decir lo que pienso, de saber más. Y si os digo la verdad, este despertar está siendo un poco traumático, porque de repente siento que nos manipulan, nos engañan, nos utilizan, de una manera mucho más terrible de lo que yo hubiese imaginado nunca. De repente lo que hace un tiempo me parecí­an auténticas paranoias, ahora me parecen verdades desprestigiadas por la manipulación de los medios.

Y me siento perdida, porque ahora no tengo un libro como aquel en el que se me digan 50 cosas simples para salvar la Tierra.

Tendremos que escribirlo entre todos.

Un saludo

2 comentarios:

  1. Niña guerrera!!! a por todas!! por suerte o por desgracia nos manipulan, pero también por desgracia sabemos mucho, a veces parece más fácil vivir en la ignorancia...porque aunque hemos avanzado en muchas cosas, en otras seguimos igual. BESOS

    ResponderEliminar
  2. Dice José Luis Sampedro que hemos avanzado "un 10 en tecnología, un 0 en humanidad". Y por desgracia no le falta razón...

    ResponderEliminar